(Palau de la Música, pianos al carrer)
El aspecto no identifica, la imagen no delata, ni siquiera da pistas. No has de tener una pinta concreta para ser un pianista, incluso uno excelente, tu apariencia no te acusa, no informa sobre lo que realmente eres.
Antes de decirle al chico que yo no era pianista, antes de desenmascararme, él, ni siquiera se planteó, que en realidad, yo, era un payaso sin disfraz.